
Retrospectiva: 30 años de Evangelion, el gran anime de Hideaki Anno

Introducción
Cuando Neon Genesis Evangelion llegó a las audiencias japonesas a través de TV Tokyo en otoño de 1995, seguramente muy pocos imaginaban el enorme impacto que tendría en la industria del entretenimiento no sólo en Oriente, sino alrededor del mundo. Dando un giro de 180 grados a los estándares del género mecha y el rubro de la animación en general, Evangelion supuso una renovación para el desgastado gremio del anime japonés de aquel entonces, y abrió una nueva brecha para que esta forma de arte se popularizara a nivel global.
Ya sea que te identifiques como un fanático declarado de la cultura otaku o tu interés por el tema sea muy superfluo, seguramente has oído hablar de la franquicia en al menos una ocasión, pues su influencia ha traspasado fronteras y se ha cimentado como uno de los pináculos de la ciencia ficción moderna, envuelta por un aire de misticismo casi tan fascinante como intimidante. Evangelion es todo un fenómeno; eso es innegable. Pero, ¿cuál es la verdadera historia detrás de su apabullante éxito? Para contestar esta pregunta, vale la pena colocar los reflectores sobre el hombre responsable de la creación de esta colosal obra: Hideaki Anno.
Hideaki Anno: el creativo tras Evangelion
Anno, nacido en 1960, hoy en día es reconocido como uno de los creativos nipones de mayor envergadura en el campo del cine y la animación. Claro, esto no siempre fue así, y como todos los grandes, tuvo que trabajar duro para forjar su reputación. Durante su juventud, Anno estudió en la Universidad de Artes de Osaka y se involucró en toda clase de proyectos creativos, algunos de carácter informal y hasta paródico (como Daicon Films’ Return of Ultraman), y otros de mayor renombre (entre los que destaca The Super Dimension Fortress Macross). Tras dejar de pagar su matrícula universitaria deliberadamente, Anno terminaría siendo expulsado, pero esto no le impidió progresar en su carrera, y al poco tiempo, terminaría colaborando con Hayao Miyazaki (eventual fundador del venerado estudio Ghibli) en la película Nausicaä of the Valley of the Wind, misma que le valió el total respeto de Miyazaki, a la par que le ayudó a expandir sus horizontes como profesional.
En diciembre de 1984, Daicon Films cambiaría su nombre a Gainax, y con Anno como director insignia, surgirían múltiples clásicos de culto en los años siguientes, como Royal Space Force: The Wings of Honnêamise (1987), Gunbuster (1988) y Nadia: The Secret of Blue Water (1990-1991). Finalizado su trabajo en este último filme, Anno caería en un fuerte lapso de depresión, condición con la que lidiaría durante gran parte de su vida, y se sabe que alrededor de este mismo periodo, Gainax alcanzó un acuerdo con King Records para formar un comité de producción en donde se otorgó total libertad creativa a Anno para concebir un nuevo proyecto. Motivado por plasmar sus experiencias con su propia enfermedad mental, así como decidido a reivindicar el nombre de Gainax tras sus recientes fracasos comerciales, se abrió el telón para el inminente arribo de Neon Genesis Evangelion al panorama televisivo oriental de mediados de los noventa.
Reseña de Neon Genesis Evangelion
Neon Genesis Evangelion nos cuenta su historia principalmente a través de Shinji Ikari, un chico de 15 años que habita un planeta Tierra devastado por el llamado “Segundo Impacto”: un cataclismo desatado por fuerzas divinas, que tuvo como resultado el derretimiento de los polos, el aumento del nivel del mar y la muerte de aproximadamente el 50% de la raza humana. Ahora, la humanidad se enfrenta a la llegada de los “ángeles”, criaturas de origen desconocido cuya meta es la extinción del hombre. Para asegurar su supervivencia, los humanos, a través de la agencia NERV, han desarrollado el arma definitiva: los “Evangelion”, titanes de apariencia robótica que representan la última alternativa para hacer frente a la aniquilación.
Tratándose de un trabajo de ficción tan reverenciado, sorprende darse cuenta de que las fuentes de inspiración e influencias para Evangelion directamente mencionadas por su autor, son poquísimas. Algunas resultan más que evidentes, como Mobile Suit Gundam, Devilman y la mitología judeocristiana, pero, de ahí en más, el enfoque tan personal y psicológico de los personajes sólo puede atribuírsele al acercamiento tan especial e íntimo que el propio Anno decidió tener con su creación.
Durante la primera mitad de la serie, vemos a Shinji batallar con su rol de “niño elegido”, pues le corresponde pilotar una de las unidades de “Evangelion” (específicamente, la poderosa unidad 01) y fungir como protector de un mundo por el cuál no siente particular apego. Del mismo modo, su complicada relación con su padre, Gendo, comandante de NERV y quien abandonó a Shinji durante la infancia, no facilita las cosas. También tenemos a Misato Katsuragi, jefa de operaciones, con quien Shinji desarrolla un intrincado vínculo de fraternidad/empatía; a la doctora Ritsuko Akagi, de carácter mayormente sosegado, pero de intelecto agudo y naturaleza temperamental; a Ryōji Kaji, con quien Misato tuvo un romance significativo en el pasado y ahora parece ocultar algo detrás de su perpetua amabilidad y seductor semblante; a Kōzō Fuyutsuki, mano derecha de Gendo y partícipe silencioso de un esquema que involucra a entidades superiores; y finalmente, pero no menos importantes, a Rei Ayanami y Asuka Langley Sōryu, pilotos de “Evangelion”, que, al igual que a Shinji, les ha tocado la funesta suerte de arriesgar su vida y combatir en pro de la salvación humana.
Estos personajes cuentan con múltiples capas, orígenes y motivaciones. Sus luchas, la mayor parte del tiempo, son internas, y casi sin saberlo, todos ellos juegan un importante papel en el camino trazado por el misterioso grupo SEELE: emisarios de la verdad definitiva y cuya meta es la “Instrumentalización Humana”, la siguiente etapa de la evolución que hará que los hombres vuelvan a ser uno mismo, desprendiéndose de su individualidad y alcanzando un nuevo estrato de consciencia que traerá como consecuencia la inmunidad ante toda adversidad existente en el universo.
Sobre el polémico final de Evangelion
Mucho se habla de lo ininteligible que puede llegar a ser el argumento de Evangelion en términos de cómo progresa la trama y el abrupto cambio estilístico que sufre la narrativa durante la segunda mitad de la serie, adoptando un tono orientado hacia el psicoanálisis y la autoexploración de la mente.
Anno, no poco influenciado por La Enfermedad Mortal de Kierkegaard, aborda estas ideas con un lente rigurosamente filosófico y, ¿por qué no decirlo?, incluso teológico, proyectando en Shinji sus propios pensamientos, opiniones, miedos y rasgos intrínsecos, culminando en un bombástico, aunque controversial, estudio de la psique de nuestros protagonistas durante los dos episodios finales, el 25 y el 26. Este primer final de Evangelion goza de un sorpresivo optimismo respecto al mensaje que envía al espectador. Anno había logrado sobreponerse temporalmente a su tendencia depresiva, y así lo reflejan las palabras finales de Shinji, reconociendo que merece la pena encontrar el valor en uno mismo y en los lazos que establecemos con aquellos que nos rodean. Lo anterior, aunado a los satisfactorios índices de audiencia, hizo del anime una victoria para el director y para el resto del personal involucrado en Gainax, pero, como a menudo sucede, no todo puede ser miel sobre hojuelas.
El furor desatado por Evangelion no tardó en volverse palmario. Legiones de fanáticos no dudaron en alzar la voz para profesar su amor por los personajes y el universo creados por Anno, e igualmente, no tuvieron tapujos a la hora de expresar su descontento con el desenlace que había tenido el anime en televisión. Terriblemente, el disgusto degeneró en amenazas de muerte, vandalismo en las instalaciones de Gainax y exigencias de una nueva conclusión argumental que pudiera cumplir con los estándares impuestos por la fanaticada. La respuesta a las súplicas llegaría a los cines de Japón en 1997 con The End of Evangelion, largometraje que, como bien lo indica su mordaz título, pondría punto final al mito construido por Gainax en la antesala al nuevo milenio. The End of Evangelion no debe tomarse como una corrección de lo planteado durante el último par de episodios de la serie, sino como un complemento, uno que da verdadero cierre al eje central construido a lo largo de este épico relato, el ya mencionado “Proyecto de Instrumentalización Humana”, que orilla a Shinji a elegir el destino de la Tierra y de la vida que en ella ha florecido. Anno, habiendo recaído en su enfermedad, optó por un tinte existencialista para esta última entrega, y resueltas todas las incógnitas, sólo quedaba especular qué es lo que vendría a continuación.
El próximo anime que dirigiría Anno sería Kareshi Kanojo no Jijō, de corte romántico y juvenil, basado en el manga de Masami Tsuda. Desacuerdos entre la visión de Anno como director y de Tsuda como progenitora de la obra hicieron que la adaptación fuera cancelada prematuramente. Paralelamente, Anno haría su debut como cineasta live action con Love & Pop, una pieza experimental que reafirmaría su visión artística; además, las restricciones televisivas impuestas por las autoridades tras el infame incidente de fotosensibilidad desatado durante la emisión del episodio #38 del anime de Pokémon le incitarían a jurar que jamás volvería a dirigir obras animadas para la TV, cosa que al final no cumplió. Gainax volvería a incursionar en el género mecha con FLCL en el 2000, pero esta vez, Anno se involucraría únicamente a nivel de supervisión, prefiriendo ejercer como mentor de nuevos talentos dentro del estudio.
El cambio de siglo trajo consigo nuevos retos a nivel sociocultural para las naciones. Sobra decir que, de muchas maneras, el 11 de septiembre marcó un antes y un después en nuestra historia, y la tecnología, a su vez, comenzó a progresar a pasos agigantados. Así como el mundo en derredor, los humanos siempre nos encontramos en constante cambio, junto con nuestras convicciones y la forma en que evaluamos las cosas. Este intrigante horizonte fue el catalizador para que Hideaki Anno reviviera su magnum opus: un nuevo Evangelion para una nueva era. Y así, vio la luz Rebuild of Evangelion, una tetralogía fílmica lanzada entre 2007 y 2021 que retoma los conceptos desarrollados durante la serie original y expande aún más el contexto, integrando nuevos personajes clave (como la piloto Mari Makinami Illustrious) y eventos que, si bien hacen eco de lo visto años atrás, también cuentan con la suficiente frescura como para asegurar que el fiel seguidor de antaño sienta el deseo de involucrarse una vez más en esta aventura, sin mencionar el deleite inherente de la animación vanguardista.
Rebuild of Evangelion es el regalo de un Anno más maduro y experimentado, quien se da cuenta de las alturas que ha alcanzado su propio trabajo y, por más que a veces parezca que estas películas sucumben ante el fan service, al final llevan a buen puerto su intención, poniendo la cerecita sobre el pastel de un legado sumamente importante.
El legado de Evangelion
La influencia de Evangelion se reflejó desde su aparición. El subsecuente lanzamiento de animes como Cowboy Bebop y Serial Experiments Lain, que hicieron mella en Occidente, terminó de demostrar que había espacio para series de animación más maduras y con temáticas intelectualmente estimulantes. Videojuegos como Metal Gear Solid forman parte de una corriente artística contemporánea a Evangelion y, de todos modos, sería difícil argumentar que Evangelion no tuvo injerencia alguna sobre la visión del legendario Hideo Kojima a la hora de plasmar su épica odisea jugable. Incluso hoy, continúan apareciendo animes que tratan de colgarse de la fórmula de Evangelion, replicando su premisa, pero sin ofrecer verdadera sustancia (véase Darling in the Franxx). Autores de la talla de Gege Akutami (Jujutsu Kaisen) nombran a Evangelion como punto de referencia inequívoco.
Anno continúa al mando de su estudio, khara, bajo el cual corrió la producción de la saga Rebuild, y se ha dedicado a trabajar en las propiedades intelectuales más icónicas del país del sol naciente, como Ultraman, Godzilla, Kamen Raider y Gundam, con las cuales creció. Puesto que no tenemos la menor idea de qué es lo que depara el futuro para la franquicia de Evangelion, considero que, llegados hasta aquí, lo ideal es rememorar las palabras con las que Anno, en septiembre de 2006, anunciaba la fundación de khara y nos invitaba a sumergirnos de nueva cuenta en el extraordinario mundo de Evangelion:
Eva es una historia que se repite. Es una historia donde el personaje principal presencia muchos horrores con sus propios ojos, pero aun así, intenta levantarse de nuevo. Es una historia de voluntad; una historia de seguir adelante, aunque sea sólo un poco. Es una historia de miedo, donde alguien que debe enfrentar una soledad indefinida teme acercarse a los demás y, de todas formas, quiere intentarlo.
Evangelion es, debatiblemente, la obra de animación japonesa de mayor impacto en la cultura popular en los últimos 30 años, y su mensaje continúa sintiéndose relevante en la actualidad.
Fuentes:
- Personal Biography – 庵野秀明公式Web. (s. f.): https://web.archive.org/web/20160614020904/http://khara.co.jp/hideakianno/personal-biography.html
- Evangelion 1.11 Informational Booklet (2007).
- NEON GENESIS EVANGELION RENEWAL ANIMATION MOVIE – REBUILD OF EVANGELION (s. f.): https://mizuki.onmitsu.jp/warehouse/festival/10th/index.html
- Revista Newtype (edición septiembre de 2006).